REDACCIÓN
La actual presidenta del OPC España, Matilde Almandoz, revalidó su cargo al frente de esta organización, tal y como se aprobó en la Asamblea Nacional que se celebró en el marco de este congreso en la tarde de la segunda jornada, el viernes 23 de febrero. Le acompañan en la junta la gallega Ana Trevisani, presidenta de OPC Galicia, y de Onofre Vicente, de OPC Euskadi, como vicepresidentes; Silvia Suárez, de OPC Asturias como secretaria; Gonzalo Baró de OPC Castilla-León, y Guillém Torres, de OPC Cataluña, como vocales.
Para Ana Trevisani, este ha sido un congreso “realmente importante para Galicia y para A Coruña, porque superó todas las expectativas de los últimos 20 años de OPC España, rompiendo cifras de todos los congresos nacionales que hemos hecho, con 340 inscritos”, explicó en su papel de anfitriona, destacando además la “gran importancia” que ha tenido “porque abarcó”, dijo, “muchos temas de formación complementaria de OPC”.
Así, recordó algunas de las ideas volcadas durante el encuentro, haciendo hincapié en que “el profesional del siglo XXI tiene que ser un OPC muchísimo más formado, y debe ir más allá de organizar secretarías perfectas. Tiene que estar formado en herramientas de Inteligencia Artificial, y tiene que pensar en congresos para la transmisión del conocimiento, pero que también tengan implícito un diseño de inmersión en el destino”.
“Si no hay valor de destino y el congreso no transmite algún tipo de experiencia o de emoción, no valdrá”, y advirtió que “si el OPC que lo organiza no cumple estos parámetros, se quedará fuera del mercado en dos años”.
Además, también recordó que “tiene que cumplir con la sostenibilidad”, uno de los ejes del congreso, afirmando que de la asamblea ha salido la redacción de un decálogo con compromiso para todos los futuros congresos de España con unos mínimos de sostenibilidad. “Si no se cumplen no se podrán hacer”.
Finalmente, explicó que el congreso ha sido también muy importante para recuperar el networking directo, lo cual lo “ha hecho más vivo y más dinámico”, dijo, reconociendo que “era una asignatura pendiente de los congresos de OPC España”, y se mostró muy satisfecha por la buena acogida que ha tenido y lo que ha supuesto para la ciudad, especialmente con vista al futuro, “porque han venido más de trescientos organizadores que han podido conocer A Coruña, sus espacios, como Palexco o Montesqueiro; sus alojamientos, como el NH Finisterre, su oferta cultural y su gastronomía, y se han ido fascinados y con la idea de poder traer grandes eventos aquí”.