JOSU LIZASO
Nos piden un plan de seguridad. Así es como comienza nuestro trabajo en el departamento de seguridad de un evento. Pero, ¿qué es un plan de seguridad?
Este plan debe contener la información del evento desde las primeras tareas de montaje hasta la última tarea de desmontaje.
Cuanto más completo sea mejor. Junto a la información del evento, es importante incorporar el organigrama de tu evento con sus funciones o localizaciones y su forma de contacto, normalmente móvil, email o canal de radiocomunicaciones. Esta información permite conocer al detalle la idea, la planificación e idiosincrasia de tu evento. Normalmente, aparte del interés económico existen otras expectativas a alcanzar.
Con la información obtenida en el párrafo anterior, ya se puede realizar un análisis o evaluación de los riesgos del evento. Riesgos que el propio evento puede generar (gran concentración de personas, pirotecnia, etc.); riesgos existentes en el espacio donde se celebra el evento; y por último (y no menos importante) los riesgos externos que pueden “estropearnos” la fiesta. La evaluación de riesgos y su clasificación permite establecer prioridades para hacer frente a todos estos riesgos. Los riesgos más graves necesitan mejores y mayores medidas y los riesgos leves pueden ser evitados, minimizados o controlados con medidas menores. Vulnerabilidad, amenaza, peligro, consecuencias, probabilidad, y otros conceptos similares plantean escenarios adversos en tu evento.
Toda esta información detallada es otra parte que estará en el plan de seguridad de tu evento. Si quieres conocer las claves para elaborar un buen plan de seguridad, no te pierdas este artículo y vótalo en la web de Event Club para participar en la próxima edición de REVISTA PROTOCOLO.