ALICIA SÁNCHEZ CAÑADAS
En estos últimos días estamos viendo cómo se suceden los desfiles de alta costura en la pasarela de Paris y el impacto que está teniendo en los medios de comunicación y en las redes sociales (dada la originalidad de su puesta en escena) el llamado efecto WOW en el mundo de la moda.
Antes de entrar en materia me gustaría hacer una reflexión. Me pregunto: ¿existe realmente la “HAUTE COUTURE” en el sentido más estricto de la palabra o estamos ante un “READY TO WEAR” en inglés o lo que es lo mismo “PRÊT-À PORTER” en francés o “LISTO PARA USAR” en castellano?
El término proviene del francés Haute Couture, que se refiere a quienes tienen sus bases según las dictadas por la Cámara de la Unión de Alta Costura Parisina (Chambre Syndicale de la Couture Parisienne).
En el siglo XVIII Rose Bertin, diseñadora de moda francesa de la reina María Antonieta, fue considerada una de las primeras en introducir la alta costura en la cultura francesa. También se toma como referencia al trabajo de Charles Frederick Worth en 1885 considerado como el padre de la alta costura, ya que fue el primero en firmar sus creaciones de moda que eran denominadas auténticas obras de arte e influyó mucho en el estilo francés de la época.
A principios del siglo XX apareció la gran Coco Chanel, creando prendas más sencillas, informales y cómodas, también impulso la ropa deportiva como vestido diario. No puedo olvidarme del diseñador español Cristóbal Balenciaga, uno de los más importantes diseñadores de la Alta Costura del siglo XX.
Las características que debía tener la alta costura eran o son las siguientes:
- Elaborar prendas a medida para cada clienta, a las que se realizan al menos tres pruebas antes de la entrega.
- Sacar al menos dos colecciones al año en París, con un mínimo de 25 modelos para el día y la noche.
- Establecer al menos un atelier(“taller”, en español) en París. El taller deber trabajar jornada completa con al menos 20 artesanos.
- Los artesanos deben dedicarle entre 100 y 1.000 horas de producción por prenda.
- Deben garantizar que los tejidos usados sean exclusivos para sus diseños.
- Cada modelo debe tener tres ejemplares: Para el desfile, otro para la clienta y un tercero que formará parte de los archivos de la firma.
Por el contrario, el prêt-à-porter, ready to wear o listo para usarse se denomina a “La ropa lista para usar”, son las prendas de uso casual y diario. Suelen ser producidas en múltiples cantidades. La reproducción industrial de las prendas significó la democratización de la moda desde que fue posible producir en serie para muchos.
Sin embargo, ser ropa lista para usar no significa menor calidad. Muchas casas o firmas de moda tienen prendas de uso casual, elaboradas con altos estándares de calidad.
Por este motivo actualmente muchas firmas de Alta Costura han sacado lo que podríamos denominar un prêt-à-porter de lujo, se trata de ropa más casual de marcas exclusivas y que se pueden encontrar en grandes superficies como consumo de moda masivo.
Las firmas, Chanel, Dior, Versace, Louis Vuitton, Christian Dior, Giorgio Armani, Ferragamo, Prada, Versace, Fendi, Zegna, estarían entra las más destacadas del mundo y en alguna de ellas se dan las características de la Alta Costura y también del Prêt-à-porter de luxe.
Hechas estas aclaraciones, pienso que los desfiles de Chanel y Valentino tienen más de Prêt-à-porter de luxe que de Alta Costura.
Me voy a referir a estos dos desfiles porque creo que han sido unos eventos de moda con una gran “carga” de efecto WOW.
Este efecto se produce cuando tiene un matiz de espectacular, que la gente no está acostumbrada a presenciar y que hacen que este sea inolvidable, difícil de olvidar desde el punto de vista positivo.
Los dos eventos o desfiles contienen un alto contenido de:
- Originalidad, es imprescindible hacer algo distinto e innovador que sorprenda la mente de los asistentes.
- Emotividad, es importante que el evento cree un sentimiento, que cree emociones o las despierte.
- Elemento sorpresa, es necesario para crear el efecto WOW tener un elemento/s que nadie espera. Por ejemplo, romper con lo esperado o con lo que socialmente estamos habituados a ver.
- Sensorial, el saber “despertar” los sentidos es vital en la actualidad; hay que intentar involucrar los sentidos de los asistentes en el evento; no olvidar que tenemos cinco sentidos.
DESFILE DE CHANEL

La firma francesa sabe cómo sorprender, la casa Chanel además de hablar de moda en sus desfiles, es especialista en “hacernos viajar” sin salir de Paris. Es más, en algún caso se ha dicho si los decorados están relegando las colecciones a un segundo plano. Aunque mi opinión no es esta.
En el Grand Palais de París han creado desde el lanzamiento de un cohete, una playa, un jardín de papel, la brasserie de Coco, un casino.etc… El desfile de Chanel es de los más esperados de París.
Este año la puesta en escena del desfile corrió a cargo del escultor francés Xavier Veilhan, una pasarela creada a base de esculturas, dibujos geométricos, aros, apareció Carlota Casiraghi, ante la sorpresa de todos los asistentes, montada en un espectacular caballo con una chaqueta-joya de tweed y abotonadura de pedrería, rindiendo homenaje a sus tejidos y colores clásicos, al ritmo de una composición original del músico Sébastien Tellier.
Lo que más me ha gustado es “La amazona vestida de Chanel en perfecta armonía con el caballo, ese dialogo entre ambos que no necesita palabras para decirlo todo”.
El caballo sobre la magnífica pasarela creada por el escultor francés tiene todas las características WOW; originalidad, mucho de elemento sorpresa, capta todos los sentidos en unos segundos y emotividad.
No hay que olvidar que la familia real de Mónaco siempre ha tenido un vínculo muy estrecho con la casa francesa Chanel. Carolina de Mónaco fue muy amiga del fallecido Karl Legarfield. Desde enero de 2020 Carlota Casiraghi es embajadora de la firma.
La “maison” ha sabido unir en este desfile el lujo, la elegancia la moda y la cultura. Como ya nos tenía acostumbrados Lagerfeld, huyendo de los escenarios convencionales y aposando por transformar las pasarelas más allá de los recorridos lineales.
VALENTINO

Personalmente me ha llamado mucho la atención la apuesta de la firma Valentino en esta pasarela de París.
No cabe duda que es una de las grandes casas y firmas de moda, pero tal vez si no hubiera sido por la apuesta y los cambios que ha hecho en este desfile tal vez nos habría pasado más desapercibida su colección.
En esta ocasión Pierpaolo Piccioli director creativo de Valentino ha elegido para lucir sus creaciones modelos de todas las edades y de diferentes tallas. Huyendo así de lo que hasta ahora nos tenía acostumbrados, mujeres jóvenes y de tallas muy pequeñas.
Bajo el nombre de “Anatomy of Couture” hemos apreciado patrones que favorecen a todos los cuerpos.
También en esta ocasión está presente el efecto WOW: en originalidad porque no es habitual que firmas de Alta Costura sean tan inclusivas, realmente ha sido toda una sorpresa. Con una gran dosis de emotividad ya que mujeres a las que como a mí nos encanta esta firma hoy podemos decir que sus diseños de moda son para todas las mujeres. El elemento sorpresa es que el director creativo de la firma ha roto con lo socialmente conocido hasta ahora. La diversidad es una realidad en la sociedad y ya era hora que las casas de Alta Costura y Prêt-à-porter de lujo se dieran cuenta de esta realidad.
Como dato anecdótico apuntaré que la firma Louis Vuitton también ha contado con un Royal en su pasarela, se trata del príncipe Nicolás de Dinamarca (hijo de Joaquín y su primera esposa Alejandra). Fue el encargado de cerrar el desfile con un impresionante plumífero con capa rosa fucsia, desde mi punto de vista ideal.
El joven príncipe no es la primera vez que se sube a una pasarela y compagina sus estudios con esta actividad.

Coco Chanel:
“La belleza comienza con la decisión de ser uno mismo”.
“La elegancia es cuando el interior es tan hermoso como el exterior”.