MARÍA RAMOS
¿Qué hubiésemos pensado si nos hubiesen dicho hace años que presenciaríamos un desfile de marionetas vestidas de alta costura o que asistiríamos a una pasarela desde nuestros propios coches? O que veríamos desfiles en medio del desierto o en lo más profundo del océano. Inimaginable pero tan real como la vida misma.
Es obvio que en este último año han cambiado muchas cosas, hasta el punto de que hemos conocido nuevos escenarios que jamás hubiésemos imaginado. Como consecuencia de esto, los desfiles de moda se han visto obligados a dar un giro de 180 grados. Atrás han quedado aquellos multitudinarios eventos en los que la moda casi quedaba en un segundo plano. Para poder apreciar la consecuencia de la pandemia en dichos actos, analizaremos algunos casos.
Es cierto que muchos desfiles han seguido celebrándose de forma presencial, aunque con las lógicas diferencias que marcan las medidas sanitarias, como la distancia de seguridad, el uso obligatorio de mascarilla y todas aquellas con las que ya estamos familiarizados. Pero, una vez más, los mayores aliados en los eventos de la moda desde la temporada pasada han sido las redes sociales. Y es que, ante esta atípica situación, muchas de las grandes firmas se han tenido que reinventar y dejar de lado las pasarelas a las que nos tenían acostumbrados, y hemos sido testigos de diversos tipos de eventos, en su gran mayoría a través de las redes sociales gracias a lo que las propias firmas han compartido y también al contenido que las famosas influencers han creado con la finalidad de dar a conocer estos nuevos desfiles.
Pasarela de marionetas
El diseñador Jeremy Scott, director creativo de la firma italiana Moschino, presentó la colección primavera-verano 2021 en un cortometraje en el que había simulado una pasarela llena de marionetas. Se realizaron réplicas de los diseños reales para las modelos y entre el público se podían apreciar personalidades del sector tan relevantes como Anna Wintour o Anna Dello Russo. Este es el claro ejemplo de cómo saber llamar la atención.
Pasando a las casas francesas, Maria Grazia Chiuri, directora creativa de Christian Dior, presentó el pasado 25 de enero la colección de alta costura primavera-verano 2021 de forma virtual. Se trató de un film inspirado en las cartas del tarot, al igual que los diseños, y que a su vez rinde homenaje a su fundador, quien era entusiasta de las mancias. Y por si esto fuese poco, en su último desfile del pasado 8 de marzo, llevó sus nuevos diseños de alta costura a la Galería de los Espejos del Palacio de Versalles en un evento mágico inspirado en los cuentos de hadas y sin público. Majestuosidad y esplendor a partes iguales.
Sin duda alguna, fue un gran acierto, ya que consiguió que todo aquel que lo vio no pudiera retirar la vista de la pantalla. Y sin la necesidad de llevar a cabo un desfile de manera presencial. Lleva la pasarela virtual a otro nivel.
Al igual que Dior, la reconocida y aclamada Chanel dio a conocer su ya famoso desfile Métiers d’Art en un espacio único como es el Château de Chenonceau, un castillo renacentista situado en el valle del Loira, en Francia. Al evento tan solo acudía una de las embajadoras de la marca: la actriz Kristen Stewart.
La elegancia y la sofisticación del evento se pudieron palpar a través de la pantalla gracias al vídeo que la maison compartió a través de sus redes sociales y su propia página web para que el público pudiera disfrutar de este acontecimiento al igual que cada año.
En este sentido, es oportuno considerar que la originalidad y la esencia de estos desfiles son indispensables para llamar la atención del público objetivo e incluso de aquellas personas que no son afines a la moda, pero a las que sí les interesa el mundo de los eventos.
Un desfile que seguro pasará a la historia en el mundo de la moda, es el presentado por Balmain, de la mano de Olivier Rousteing. El verano pasado quiso rendir homenaje a todos aquellos que fueron directores creativos de la firma a lo largo de su historia, desde el legendario Pierre Balmain hasta el propio Olivier, con motivo del 75 aniversario de esta, y lo hizo nada más y nada menos que en un recorrido barco a través del río Sena. Los asistentes fueron todos aquellos que paseaban a orillas del Sena en la ciudad de la luz, París.
¿Quién no querría asistir a estos excepcionales eventos? ¿Es posible que sin la pandemia no hubiésemos podido presenciar tal cambio en el mundo del espectáculo?
En el desierto, en el océano
Tampoco podemos olvidarnos de Yves Saint Laurent y de su espectáculo virtual en mitad del desierto, uno de los eventos más punteros del sector de la moda. Fue en lo alto de las dunas de Gran Canaria donde desfilaron las modelos. Pero lo más llamativo llegó cuando al caer la noche ellas lucían sus looks desfilando al lado de una hilera de fuego.
Y si seguimos hablando de espacios únicos, no nos podemos dejar en el tintero a la italiana Versace, quien creó su propio escenario original. La diseñadora Donatella Versace presentó en la semana de la moda de Milán la colección primavera-verano 2021.
Modelos internacionales desfilaron en un entorno inspirado en el fondo del océano llamado Versacepolis. La propia diseñadora aseguró que quería crear “algo distinto que representara lo que ha cambiado dentro de todos nosotros. Para mí, eso significaba soñar con un mundo nuevo. Un mundo lleno de colores vivos y criaturas fantásticas donde todos podamos coexistir en paz”.
Por otro lado, las pequeñas marcas que no gozan de estos eventos como tal también han querido dar a conocer sus nuevas colecciones de forma original y segura. Es el caso de Zara, marca del grupo multinacional español Inditex, fundado por Amancio Ortega. La conocida marca española se vio afectada por el estado de alarma decretado el 14 de marzo de 2020 y por ello decidió presentar su nueva colección a través de fotos tomadas por las propias modelos desde sus casas, las cuales posteriormente se colgaron en su página web.
Podemos observar que con todo lo acaecido desde y durante la pandemia, las grandes firmas han sabido reinventarse y mantenerse. Y vemos cómo gracias a estos eventos las innovaciones pueden alcanzar nuevas metas.
La moda, como todos los sectores, tuvo que enfrentarse a un gran reto del cual ha salido fortalecida, porque más allá del plano artístico y creativo, para muchos es un universo de oportunidades y de libre expresión capaz de resurgir ante cualquier inconveniente.