El valor del cambio

CHEMA GÓMEZ MERINO*
CEO y fundador de Grupo Evento

El 30 de noviembre de 2007 asistí a una conferencia en la EIBTM, cuyo ponente era Eric Mottard. El objetivo de la conferencia era difundir el valor de los eventos entre los profesionales de nuestro sector; Eric captó mi atención al enseñarnos una foto de un anfiteatro romano y hacernos reflexionar sobre la importancia de la innovación en un sector que utilizaba conceptos con más de 2000 años de antigüedad.

Evidentemente lo que se mantiene a lo largo de tantos años es porque es bueno, algo habrán hecho bien los romanos y los griegos cuando son la base de nuestra cultura, auditorios bien construidos, ponentes que se escuchan en ágoras, votaciones y discursos que motivaban a los asistentes… son conceptos que seguimos usando desde aquellos momentos.

Actualmente vivimos, ya 15 años después de la reflexión de Eric, en un momento especial en el que el cambio sobre los usos y utilidades del sector MICE son necesarios y tenemos que abordarlos lo antes posible.

Voy a compartir con todos vosotros una serie de conceptos sobre los que me encuentro trabajando; cambios que opino que deberían de afectar de verdad a nuestro sector a corto plazo y sobre los que me encantaría tener vuestro feedback y opiniones para encaminarnos juntos a una nueva versión mucho más actualizada de los que es nuestro trabajo.

Concepto 1. Retención del talento.

La pandemia ha ocasionado múltiples cambios en nuestras vidas, tanto en el ámbito profesional como en el personal (aunque yo opino que es una sola vida…), ahora trabajamos desde casa, cambiamos hábitos instaurados a fuego en generaciones y entre todos esos cambios, me fijo en la gran fuga de profesionales que hemos sufrido en nuestro sector.

Hemos leído en redes sociales y escuchado en multitud de conversaciones en nuestros eventos, la evidente falta de recursos humanos en nuestras empresas MICE.

Esta situación de fuga y pérdida de talento es causada en unos casos por la caída de proyectos de estos dos años, en otros sin embargo es debida a la atracción de nuestros profesionales por sectores emergentes con mejores condiciones laborales.

Sin extenderme en explicaciones que darían para un post por sí mismo, la retención del talento se centra en satisfacer las necesidades económicas y personales de los profesionales.

En lo referente a las necesidades económicas me sigo encontrando con empresas y profesionales del sector con precios ridículamente bajos en sus presupuestos, aún ahora, en tiempos en dónde la demanda de nuestros servicios es muy alta, supongo que con el objetivo de ganar mercado o clientes, siendo esta falta de recursos económicos, bajo mi punto de vista, la principal razón que ocasiona en parte la fuga de talento; por otro lado, las nuevas generaciones de profesionales y muchos de los que ya llevamos 30 años en el sector, reflexionamos sobre “vivir mejor” con la pandemia, nos dimos cuenta de lo importante de la vida, buscamos un propósito en nuestro camino y sobre todo nos centramos en cuidar tanto nuestra salud física como emocional.

Opino que pocas empresas del sector hemos iniciado cambios que se alineen con estos nuevos conceptos, con todo lo que ayudan (creo que más que los puramente económicos) a retener a los buenos profesionales entre nosotros.

Concepto 2. Empresas conscientes.

Hemos vivido años aprendiendo de Gurús empresariales que nos han enseñado a que la empresa es lo más importante, que los beneficios tienen que ser la base de la gestión empresarial, que la rentabilidad y la productividad van de la mano y que han exprimido y optimizado los recursos básicos empresariales, capital humano, materias primas, proveedores, tecnología… en un claro objetivo de maximizar los beneficios de los accionistas, provocando un aumento de la brecha salarial entre las clases altas y bajas de las empresas. Me permito recordar numerosas empresas en banca rota con directivos y accionistas que se han enriquecido incluso en estos malos momentos, o empresas que han esquilmado espacios naturales ante la mirada estática de las administraciones públicas y de la sociedad en general.

Hoy en día, sin embargo, se está demostrando que empresas que se guían por objetivos basados en los ODS, que trabajan con OKR tanto empresariales como personales (consultar el libro “Mide lo que importa” de John Doerr), empresas conscientes de trabajar para sus actores implicados (consultar el libro “Capitalismo Consciente” de John Mackey y Raj Sisodia), empresas con liderazgo femenino (mucho más que un sexo, unido a valores y actitudes que ahora por fin se reconocen) están generando tremendos beneficios, incluso mayores que los de empresas “sin piedad” en las que todos hemos vivido y trabajado.

Creo que esta tipología de empresa es aún incipiente en un sector que está muy seriamente afectado por todo este tipo de condicionantes.

Concepto 3. Tecnología en nuestro sector.

Hemos hablado en muchos foros, de conceptos como Digitalización, Innovación, Desarrollo tecnológico…, incluso IA.

En nuestro sector hemos introducido tecnología, no solo en la digitalización de nuestras empresas, en reuniones virtuales, en software de gestión de acreditaciones, en presentaciones virtuales….. y ahora en el paradigma del Big Data o en Metaverso.

Recuerdo ahora que hace ya algunos años, en 2014, en la redacción del Global Report on the Meetings Industry que coordinépara la UNWTO, conversando con WeeMin Ong, vicepresidente de Marina Bay Sands, me indicaba que su verdadero negocio no eran sus 12.000 habitaciones en su centro de convenciones, ni los eventos que albergaban con sus caterings y medios audiovisuales espectaculares, sino los datos que se generaban de todos sus usuarios y lo que pueden aportar a su negocio y al de sus clientes.

Hoy sin embargo aún me cuesta encontrar colectivos sociales, empresas o asociaciones que usen de manera eficiente todos estos datos, que a día de hoy, son sin duda aún mayores. Tenemos un campo enorme de datos sin usar, sin estudiar y con una enorme cantidad de beneficios esperando a que los utilicemos. Beneficios para las Personas que los generan, no solo para determinadas empresas que los explotan al captarlos.

Concepto 4. Las Personas.

Analizando en conjunto todos los conceptos anteriormente citados y otros muchos que ahora no vamos a entrar, identifico que el vínculo común en todos son las Personas.

Trabajamos con perfiles profesionales que ya priman el trato personal, la flexibilidad, la conciliación sobre otros muchos conceptos a la hora de elegir dónde trabajan, Personas.

Buscamos empresas con sentido, que pongan en el centro de su mirada el entorno, los colectivos de trabajadores, los proveedores, comprometidos con el desarrollo sostenible, en definitiva Personas.

En cambio, pocos estudios estamos realizando en nuestro sector relacionados con las Psicología, la Sociología, la Antropología y otras ciencias que estudian el comportamiento del ser humano en sociedad.

Somos personas, personas que nos relacionamos con otras en nuestros eventos, personas que nos comportamos con patrones que otras ciencias ya han estudiado pero que aún no aplicamos.

Evidentemente lo que satisfizo a nuestros clientes hace 25 años ahora ya no lo hace. Si queremos ser reconocidos como sector y como profesionales del mismo, desde mi punto de vista necesitamos poner en valor un cambio de verdad.

Necesitamos tener unos estudios científicos, que avalen la verdadera importancia de nuestro trabajo. La implementación de la tecnología en el sector debe de ser impulsada desde empresas Tech, que van a invertir en desarrollos en nuestro sector en el momento en que demostremos con evidencia científica que la utilidad de juntar a personas va más allá de un café o comida compartida.

Hiperadaptabilidad de contenidos, eliminar los ruidos (consultar el libro “Noise” de Daniel Kahneman), entender la aparición de nuevas fuentes de recursos económicos para nuestras empresas, comprender al nuevo usuario o yosumidores (consultar libro “Yosumidor” de Andrea García, Pablo Pérez y Felipe Romero), las nuevas capacidades del marketing, los estudios de la inteligencia colectiva (consultar libro “El libro de la Inteligencia Colectiva” de Amalio Rey), los nuevos modelos de negocio que han nacido en nuestra sociedad y sobre todo Personas, centrarnos en ellas y dar soluciones es nuestro reto.

No hablo de cafés, ni de presentaciones espectaculares, ni de redes sociales… escribo y pienso sobre cambios de reglas que mejoren nuestros resultados. Y estoy seguro de que nuestro sector no solo puede, sino que debe valorar el cambio al que nos estamos enfrentando, cambios reales ¡¡¡ya!!!

Y para despedirme, me gustaría agradecer vuestro tiempo de lectura y espero vuestras reflexiones para poder transformar juntos esta profesión que nos apasiona.

(*) Artículo publicado en eventmanager.es